Existen dos grandes familias dentro del café: Robusta y Arábica.
El cultivo del café robusta proviene de África Occidental y Central, del Sudeste de Asia y parte de América del Sur.
Es un arbusto de hasta 10 metros de altura. Muchas veces no se deja crecer tan alto por la dificultad que implica la recolección.
Su nombre científico es Coffea Canephora.
De este tipo de café existen muchas variedades silvestres, entre las principales se distinguen:
Erecta (forma recta)
Nganda (forma esparcida)
El arábica es originario de Etiopía, aunque en la actualidad destaca su mayor producción en América Central y América del Sur.
Proviene de un árbol llamado Coffea Arábica.
Hay una gran variedad en lo que se refiere a este tipo de café. Dependiendo de las diferentes regiones de su cultivo destacan:
Criollo (original africano)
Pache (Guatemala)
Bourbon (Isla Rincón)
Caturra (Brasil)
Java (América tropical)
Blue Mountain (Jamaica)
Para conocedores… principales diferencias entre café robusta y arábica.
El robusta tiene aproximadamente el doble de cafeína y el doble de concentración de ácido clorogénico, un importante antioxidante.
El arábica contiene casi un 60% más de lípidos y casi el doble de concentración de azúcar.
El robusta cuenta con 22 pares de cromosomas, mientras que el arábica tienen 44 pares. Lo que lo hace, a ojos de los expertos, un café con una amplia ventaja en aromas y matices.
El arábica es un café mucho más versátil que el robusta, por eso lo hace un café más costoso.
El arábica, apodado el grano de café gourmet, se asocia a un concepto de calidad superior. Las mezclas de mayor calidad son de arábica puro, aunque el robusta de alta calidad, suele ser tan bueno o mejor.
¡El chiste… un buen tostado!
Para que un grano de café saque sus verdaderas cualidades, debe tener un adecuado tueste.
Si el tostado no se hace de forma correcta, alterará su sabor.
Si se toma el tiempo necesario para el tostado, el café arábica puede mostrar muchos matices: frutas y flores, hierbas y dulces, notas a cuero, a madera, suave, especiado y muchos más.
En tanto, el tostado del robusta nos brinda olores y aromas a tierra, madera y chocolate amargo, por lo general, sabores mucho más fuertes.
En Finca El Rey cultivamos y producimos café arábico de sombra en la región montañosa del estado de Veracruz, a 1,200 metros sobre el nivel del mar, arrojando una calidad de altura.
